Tu reputación en línea lo es todo, sobre todo en este mundo digital, el cual es vertiginoso. La imagen de tu marca puede dispararse o desplomarse en poco tiempo, por una línea de productos impecable o servicios de primer orden. La reputación online de tu marca es el motor silencioso que va a impulsar el éxito.
No es sorpresa que más del 80% del valor del mercado de una organización se encuentre vinculado a factores intangibles como la reputación. Si no la estás gestionando, no esperes una mejora en la imagen de tu marca. La percepción se convierte en realidad, al menos en Internet, así que debes establecer estrategias comprobadas que te ayuden a mejorar la reputación de tu marca, convirtiendo los desafíos en oportunidades de éxito.
La gestión de la reputación online debe ser estratégica
La gestión de la reputación online no se trata de eludir los malos comentarios y la mala publicidad; es un proceso estratégico que se define entre jugar a la defensiva y a la ofensiva. Si quieres mejorar la imagen de tu marca, debes dirigir conversaciones, moldear percepciones comunes y estar adelantado unos pasos en este juego.
Si tienes un enfoque bien equilibrado, puedes combinar la reputación online, marketing, ventas y atención al cliente dentro de las estrategias que puedan mantener tu empresa en lo más alto. El posicionamiento de tu marca como referente y líder de un sector o modelo de negocio es de vital importancia, por medio de reseñas destacadas o una presencia coherente y frecuente en las redes sociales.
Es bien sabido que casi la totalidad de los consumidores buscan información de marcas en Internet y no tienen ningún tipo de complicación a la hora de compartir sus opiniones. Solo se necesita un tuit viral o una publicación en Instagram o TikTok para hacer que tu marca se eleve o se derrumbe, por lo que mantener la reputación online en el centro de tu estrategia es una prioridad.
Debes combinar métodos tradicionales y disruptivos para tener éxito
Aunque el ciberespacio es crítico para mejorar la imagen de tu compañía o modelo de negocio, el networking y el “boca a boca” todavía tienen una importancia fundamental para moldear la percepción de marca. Tienes que equilibrar las estrategias online y fuera de línea para garantizar una imagen sólida, coherente y sincera en todos los puntos en los que haces contacto directo e indirecto con tus clientes.
Partiendo de los principios de que ninguna marca es invencible y las crisis son inevitables, la manera en la que respondas va a marcar la diferencia. Toma el control de la iniciativa y muestra resiliencia para convertir una posible catástrofe en una oportunidad de crecimiento. También, un plan de crisis va a ayudarte a transformar los retos en pruebas de valor para tu marca.
Una buena gestión de la reputación online para mejorar la imagen de tu marca no se trata de verse bien, se trata de ser una empresa en la que tu audiencia pueda confiar a pesar de todo. Una imagen sólida y coherente va a generar confianza y lealtad. Los consumidores de hoy se preocupan por mucho más que los productos, les importa también lo que representa tu organización.
Cuando logras alinear tu marca con causas significativas puede ayudar a elevar su reputación y va a fidelizar a los clientes establecidos. Cuando las personas confían en ti y en tu producto no solo compran, siguen volviendo por más.